POR QUÉ ESTE BLOG


Este blog nace como consecuencia de la observación repetitiva de las deficiencias de nuestra bella ciudad.

Caminando diariamente por sus calles y sus espacios, se palpa una Miróbriga diferente a la ciudad que nos quieren vender: nos ofrecen historia, arte, belleza… y normalmente nos encontramos con una ciudad descuidada, una urbe a la que le fallan muchos de sus escaparates. Una villa que se hunde entre el abandono y la dejadez. Un pueblo que obliga a sus jóvenes a estudiar lejos de sus murallas, a emigrar porque aquí no encuentran una mínima posibilidad de supervivencia.

Sin embargo, y aunque pueda parecerlo, no es sólo crítica lo que pretendo.

Busco, como su nombre indica y aprovechando el Bicentenario, derribar ese muro que ante sus ojos tienen muchos vecinos y nuestros gobernantes.

A través de este espacio, pretendo abrir una brecha en este conservadurismo que nos gobierna, así como remover conciencias conformistas. Invito a todos aquellos con las mismas inquietudes que yo a que denuncien desde aquí aquello que les parezca injusto, indebido, antiestético, peligroso… Intentemos frenar el deterioro de la ciudad, especialmente cuando éste ese deba a la desidia de nuestros políticos. Espero que mi voz se deje oír y os pido que las vuestras me acompañen.



domingo, 23 de enero de 2011

EL EMBALSE DE IRUEÑA






Durante estos últimos días ha estado presente en muchas conversaciones de mirobrigenses y comarcanos el tema de la presa de Irueña, especialmente después de la crecida que tuvo lugar el pasado 8 de enero. Incluso han “colgado” varios vídeos en Youtube en los que se aprecia la altura que el agua alcanzó en esos días (os pongo aquí el enlace a uno de ellos para que podáis visionarlo:
http://www.youtube.com/watch?v=r1hDamKxiUY
La zona se ha convertido en un peregrinar de decenas de personas, ávidas de ver y comprobar por sí mismas las noticias y fotografías que aparecían en los periódicos. Se comentaban en la prensa las quejas por parte de algunos ediles de la comarca así como de grupos regionalistas por la aparición de grietas en el puente que atraviesa el Águeda pocos metros antes de la presa y que forma parte de la carretera que une El Bodón con Robleda. Éste es de momento el único acceso a la comarca de El Rebollar y a Cáceres. Se trata de una carretera bastante transitada por vehículos de gran tonelaje, así como por autobuses, la mayoría de transporte escolar que trasladan diariamente a los alumnos de esta zona a los institutos de Ciudad Rodrigo.
Efectivamente, la grieta está ahí y es de gran tamaño, fruto sin duda de la presión que un puente, no construido en su momento para soportar las corrientes intensas de agua, padece ahora. También es verdad que las autoridades competentes se dieron prisa en desembalsar agua ante la crecida de las últimas jornadas. No he podido evitar trasladarme para comprobar y fotografiar personalmente la zona, Yo os la muestro y juzgar por vosotros mismos.
Parece que los técnicos de la Junta no ven peligro alguno en esas grietas, al menos a corto plazo. Sin embargo, por lo publicado en diferentes medios, parece que se volará, más pronto que tarde, una vez finalizados y acondicionados los accesos al nuevo puente que ya está construido aguas arriba. Esperemos que no sea demasiado tarde.
Por lo demás, la presa cumple su función y regulará y evitará más inundaciones a su paso por Ciudad Rodrigo.

sábado, 15 de enero de 2011

VUELTA A LA NORMALIDAD






Ya se acabaron las fiestas y con ellas el trajín de compras, comidas, cenas y visitas familiares. Los de fuera, esos que aprovechan cualquier oportunidad para darse una vuelta por la ciudad, han regresado ya a sus hogares. Vuelta al trabajo, a la rutina y a la cotidianidad.
Las lluvias que intermitentemente nos han acompañado desde el inicio de las Navidades, siguen ahí inundando nuestros campos y llenado de charcos nuestras calles, colmando los baches que últimamente hemos visto aparecer. El Águeda discurre pleno, incluso rebasando el cauce habitual, parece que Irueña cumple su función de frenar o regular las avenidas de agua.
Ya han subido al Santo y en pocas jornadas, antes de que nos demos cuenta, empezarán los preparativos del carnaval.
Ayer las calles amanecían otra vez silenciosas, vacías, aún colgando de ellas los adornos luminosos de estos días, que esperemos tarden poco en retirar. O de lo contrario ocurrirá, como en años anteriores, que convivirán agujas con adornos navideños en algunas jornadas.
Sigo insistiendo en que las banderas que ondean o se enrollan en los cables debieran ser quitadas, pues afean la imagen de nuestra ciudad. Igual que algunos edificios en el mismo centro de la ciudad, sobre los que ya he escrito alguna vez, llenos de carteles y en claro abandono.
Me gustaría que, al comenzar este año empezásemos a vislumbrar el final de la crisis o, al menos el convencimiento de que ésta desparecerá. Porque, si no fuera así, el desanimo nos haría hundirnos aún más.