POR QUÉ ESTE BLOG


Este blog nace como consecuencia de la observación repetitiva de las deficiencias de nuestra bella ciudad.

Caminando diariamente por sus calles y sus espacios, se palpa una Miróbriga diferente a la ciudad que nos quieren vender: nos ofrecen historia, arte, belleza… y normalmente nos encontramos con una ciudad descuidada, una urbe a la que le fallan muchos de sus escaparates. Una villa que se hunde entre el abandono y la dejadez. Un pueblo que obliga a sus jóvenes a estudiar lejos de sus murallas, a emigrar porque aquí no encuentran una mínima posibilidad de supervivencia.

Sin embargo, y aunque pueda parecerlo, no es sólo crítica lo que pretendo.

Busco, como su nombre indica y aprovechando el Bicentenario, derribar ese muro que ante sus ojos tienen muchos vecinos y nuestros gobernantes.

A través de este espacio, pretendo abrir una brecha en este conservadurismo que nos gobierna, así como remover conciencias conformistas. Invito a todos aquellos con las mismas inquietudes que yo a que denuncien desde aquí aquello que les parezca injusto, indebido, antiestético, peligroso… Intentemos frenar el deterioro de la ciudad, especialmente cuando éste ese deba a la desidia de nuestros políticos. Espero que mi voz se deje oír y os pido que las vuestras me acompañen.



domingo, 28 de marzo de 2010

BAJO EL DESPACHO DEL SR. ALCALDE





En nuestra ágora principal, en nuestra casa común, justo debajo del mismísimo despacho del Sr. Alcalde, la imagen del deterioro está más visible que nunca. En el mes de diciembre ya me permití resaltar esta situación y esperaba (dado que este año estamos de celebración) que se cuidaran un poco más los detalles. Pero parece que mi espera ha sido vana.
Ya sabemos que estamos en crisis, que hay que vigilar un poco más de lo normal el gasto, pero creo que cambiar cuatro ventanas, poniéndole unos cristales nuevos, no puede suponer un gran desembolso (seguro que con una décima parte de lo que nos costó la invitación a las autoridades en los pasados carnavales). Esa imagen deprimente del Ayuntamiento se habría podido subsanar. ¿Quieren que les recomiende alguna empresa cristalera de la localidad? seguro que les harían un buen precio y así, de paso, nos ahorraría a los farinatos la vergüenza de mostrar un espléndido edificio renacentista “adornado” con una ventana tapada con cartones. ¿No la ven ni el alcalde ni los concejales cuando suben a sus despachos? ¿No les parece que eso no se puede permitir en una ciudad que pretende vivir del turismo? En realidad esta situación no puede tolerarse en ningún sitio, por la imagen que da de chabolismo y de infravivienda.
¿Y que me decís de las vallas –tipo corral de cabras– que han vuelto a colocar entre las jardineras? No me canso de decir que una señal de prohibido aparcar sería suficiente, o si no bastaría con la presencia de la Policía Local para disuadir a los que aparcan mal. Espero que alguien de este Ayuntamiento tenga un mínimo sentido estético y las retire.
Como en ediciones anteriores, las procesiones empujarán las jardineras, arrimándolas a las aceras (que es donde deberían estar siempre); y espero que las estaciones de penitencia retiren también los antiestéticos conos que enmarcan los cañones. Cañones con los que, por otra parte, habría que tener cuidado, si no queremos ver en algún periódico o en la misma red la foto de estas piezas de artillería apuntando a alguna imagen de las que van a desfilar.

Felices vacaciones a todos los que siguen este blog. Volvemos en la semana de Pascua.

miércoles, 24 de marzo de 2010

¡CUÁNTA BASURA CUARENTA DÍAS DESPUÉS!






Hace exactamente ese tiempo os mostraba, abochornada, cómo habían dejado el paseo Fernando Arrabal los carnavales.
Bueno… En realidad publiqué la entrada el Domingo de Piñata. Hoy, todas esas jornadas después, os vuelvo a mostrar, esta vez enrabietada, cómo está toda esa zona a fecha de hoy.
Las fotos son diferentes, pero la situación de desorden, de suciedad y de caos es la misma que aquel lluvioso día reproduje.
Los cristales llevan camino de repetir la historia del año anterior: ni se han recogido ni se espera que se recojan.
Nadie ha reparado el seto que se destrozó con la irrupción de puestos y camiones en el jardín; ni siquiera se han tapado las huellas que unas ruedas de otro vehículo marcaron en el jardín adosado al lienzo de la muralla.
El deterioro de la catapulta ha aumentado preocupantemente, y toda esta situación ha sido contemplada y comentada por las decenas de turistas que nos visitaron este último puente de San José.
La situación tampoco ha variado sensiblemente en la zona de la Puerta del Sol, tanto en el aparcamiento como en los jardines colindantes a las escaleras del acceso de peatones. Si hace más de un mes fotografié botellas por allí tiradas, las mismas siguen allí.
¿Soy yo la única que repara en que algunas cosas o departamentos no funcionan bien en esta administración? No entiendo cómo no se les cae la cara de vergüenza a los responsables municipales, ante tanto abandono, a pesar de las reiteradas críticas.
En el foso la basura se acumula y se descompone. “Pero bueno…” –pensarán– “como está muy escondida, la mayoría no la ve”. Sigan haciendo promoción de la ciudad, llénenla de turistas esta Semana Santa y crucen los dedos: con suerte no se enteran nuestros visitantes de que, a escasos metros de la Plaza, se encuentra toda esta cantidad de suciedad.

viernes, 19 de marzo de 2010

DE RESALTES Y DESAJUSTES





Hace unos días me escribía una amiga que había leído el blog animándome a que escribiese una entrada sobre el tremendo, según su palabras, badén del río —“sí; ése que está en la Alameda Vieja… …que lleva hasta la fabrica de la Concha.”— Me rogaba que lo fotografiase y que dijese en voz alta lo que muchas personas comentan; lo molesto y peligroso que es.
Y yo me puse manos a la obra. Es verdad que la visibilidad está bastante limitada y que, como dice mi amiga, no lo ves hasta que lo tienes justo debajo. Que es alto en las fotos lo podéis constatar, que es molesto eso lo sabrán mejor los conductores a los que parece que semejante mamotreto no hace sino acabar dañando seriamente sus amortiguadores.
Creo que apenas hace dos años se publicó una nueva ley sobre la implantación de badenes (Reductores de velocidad y bandas transversales) que entró en vigor el día 31 de octubre de 2008. Pero esta ley es aplicable sólo a las carreteras estatales. Se trata de una norma del Ministerio de Fomento que regula su instalación. Desconozco si existe una normativa similar aplicable a los ayuntamientos o si estos son libres a la hora de instalar estos dispositivos. Y no sé si éste cumple con la normativa. Si es así, no habría más que decir, Ahora bien ¿no habría otra forma de conseguir lo que se pretende con este resalte –la reducción de velocidad de los vehículos–? ¿No hay otra alternativa menos agresiva y peligrosa para motos y para todos aquellos que sí van a la velocidad adecuada?
Y ya que la cosa va de obstáculos en la vía, no quiero acabar la entrada sin mencionar otro resalte (esta vez, supongo, involuntario): la antiestética, molesta y mal rematada unión que dejaron ya hace tiempo en el acceso de la Cuesta de Santiago, cuya foto también adjunto. Ahí sí que se han lucido. Cuando terminaron las obras, decidieron que el “rematito” final sería ese molesto “escalón”. A ver si toman nota nuestros agentes encargados del trafico y de la seguridad vial y se oyen nuestras quejas.

domingo, 14 de marzo de 2010

¿DEJARÍA JUGAR AQUÍ A SUS HIJOS?






Espero que esta entrada provoque el sonrojo y la vergüenza en los responsables municipales de parques y jardines y, en último extremo, a nuestra primera autoridad, al que pregunto ¿llevaría usted a su hija a jugar a este parque?
Pues este es el panorama al que se enfrentan decenas de vecinos de la zona de San Pelayo que se encuentran este desastre cuando llevan a sus hijos a jugar al único parque que hay por allí.
Sé que algunos vecinos incluso han ido al Ayuntamiento a denunciar el caso y a poner sobre aviso a quien pudiese competer, aunque los han despachado con buenas palabras pero con una total inacción.
Como podéis observar en las fotos, el aspecto de la zona es más que lamentable: a la suciedad acumulada de forma permanente (que no es sólo fruto del mercadillo, al que nuestros ediles echan todas las culpas) se unen las numerosas pintadas que “decoran” todo el recinto, dando aún más sensación de porquería al conjunto. Vuelvo a repetir: es verdad que nuestros adolescentes no son todo lo cívicos que quisiéramos, pero también es verdad que a esta situación se ha llegado por falta de vigilancia y por escasez de atención a esta zona.
El suelo del parque también está abandonado soltándose las losetas de corcho y faltando cada vez más piezas. Este deterioro no es algo puntual, pues llevamos ya más de una año en esta situación. La casita de juegos está cortada, sucia, deshilachada en algunos tramos, llena de antiestéticas pintadas por todas partes, amén de tener rotas algunas de las tablas del puentecillo por el que pasan los niños al jugar, convirtiendo esta zona que habría de ser de ocio y recreo en una autentica trampa para los pequeños que tropiezan y se enganchan en la casita o en los toboganes.
Los bancos, en principio metálicos y con respaldo, fueron cambiados al poco tiempo (como es costumbre de esta corporación) por otros más simples, sin respaldo y que actualmente se encuentran llenos de pintura con lo que hacen desistir a nuestros abuelos de sentarse allí.
Los toriles propiamente dichos también han sido objeto de pintadas y de vandalismo, presentando una imagen deplorable. Es habitual, sobre todo cuando el tiempo acompaña, que este parque y los toriles estén llenos de adolescentes, muchos de los cuales se dedican a manchar y a estropear todo intencionadamente, sin que nadie haga algo por impedirlo.
Por todo esto y porque considero que tenemos derecho todos a disfrutar de este tipo de espacios, ruego a nuestras autoridades que hagan algo para devolver a este lugar las condiciones adecuadas para su uso. Hasta entonces, yo no dejo jugar ahí a mis hijos.

lunes, 8 de marzo de 2010

ÁRBOL GORDO ¿TRADICIÓN O DECADENCIA?





El Árbol Gordo ha sido para nuestra ciudad punto de encuentro de muchas generaciones de mirobrigenses, punto de reunión de los más jóvenes (que han encontrado en las verjas del antiguo centro de salud su mejor asiento) y también punto de desembarco de los cientos de turistas que se desplazan a nuestra ciudad en autobús (tienen la parada estos vehículos frente al mercado de abastos). En resumen: lugar por el que pasa la mayor parte del pueblo y de los visitantes.
Nuestra tarjeta de presentación no ofrece actualmente su mejor imagen: los pinos del glacis de la parte izquierda, accediendo a la ciudad, están francamente deteriorados. Desconozco si es enfermedad o dejadez en su atención, pero su aspecto es francamente deplorable, y más después de la última tormenta.
En el lado derecho del glacis, paralelo a los arbolitos, la imagen es mucho peor, quizás debido a las recientes obras de acometida de agua: la tierra en esta zona se ha desplazado a causa de las abundantes precipitaciones, empantanando las aceras por las que los turistas acceden el centro de la ciudad. No sé si habría que consolidar con césped esta zona o aplicar alguna otra medida; pero es necesario que eso se arregle porque cada vez son más las piedras y la arena que invaden las aceras.
¿Y qué me decís de la entrada al estacionamiento de las ambulancias del 112 (trasera del antiguo centro de salud)? Las farolas que adornaban esta entrada están rotas sin que nadie se moleste en retirar los restos; y de la pared cuelga el “esqueleto” de lo que antaño fue el cartel de urgencias.
Me pregunto: ¿por qué si se quitó el luminoso no se quitó también su soporte?
Como sabemos, es zona de encuentro y permanencia de jóvenes y adolescentes, que habitualmente no tienen reparos en lanzar al suelo embases, bolsas, latas… provocando que los jardines que circundan el entorno, especialmente aquellos donde ellos se sientan estén totalmente descuidados.
Entiendo que los servicios de limpieza municipales se escuden en que esos jardines no son de su competencia. Efectivamente están en propiedad no municipal pero de alguien serán competencia; alguien tendrá que encargarse… Porque esa dejadez desluce el entorno. Pasa el tiempo y nadie hace nada para remediarlo.
Y qué me decís del propio Árbol Gordo, antaño símbolo del pueblo y hoy muerto y sin que la hiedra haya sido la solución más adecuada. Presenta, sobre todo en invierno, una imagen devastadora, incluso como se oye en algunos foros “no es sino el reflejo de la decadencia de nuestra tierra”.
¿No sería mejor sustituirlo por una escultura o por una placa conmemorativa y plantar uno nuevo que llenase de vida ese nuestro punto común? ¿Opináis lo mismo que yo? Ahí dejo el debate abierto.

miércoles, 3 de marzo de 2010

MIRÓBRIGA… ¡SE VENDE O SE ALQUILA!






En estos días de pesimismo, incertidumbre e incluso miedo, dada la actual situación económica, me duele horrores recorrer la calles de nuestra ciudad y encontrarme carteles de “SE VENDE” y “SE ALQUILA”.
Cada vez son más los locales vacíos, muchos llevan unos cuantos años cerrados. Años antes de que la omnipresente crisis hubiese enseñado su negra faz, ya estaban vacíos. Pero es hoy cuando su visión golpea más mi ánimo; quizás sea porque se han hecho más visibles y parecen querer demandarme que grite en su nombre. Porque muestran una vez más el abandono y cómo la muerte en nuestra tierra viene pisándole los talones.
¿Por qué nadie se atreve a empezar un negocio, con la oferta de establecimientos que hay hoy en día?
Será porque afrontar los numerosos gastos que una nueva empresa tiene que acometer es, sin duda, un esfuerzo de titanes, aunque nos vendan que el capital inicial es fácil de obtener (raro es el día que los bancos, los únicos que siguen ganando en esta crisis, no nos ofrecen un crédito).
Los alquileres en Ciudad Rodrigo son abusivos e insostenibles y eso, unido a la multitud de pagos (impuestos municipales, autonómicos, centrales…) que a final de mes hay que afrontar, hace que los jóvenes descarten la sola posibilidad de arriesgarse.
Éramos una ciudad eminentemente comercial y centro de una amplia comarca, hoy terriblemente envejecida e incluso diría que empobrecida por la falta de savia nueva, ya que los jóvenes se han visto obligados a exiliarse para poder buscarse un futuro que aquí se ha visto difícil.
Para colmo, lo que se suponía que era el futuro y nuestro gran beneficio, la autovía, nos ha traído una sangría aún mayor: las familias no quieren vivir en Ciudad Rodrigo. Hace unos años los empleados de la Seguridad Social, bancos, centros educativos… trasladados a nuestra ciudad optaban por quedarse aquí a residir con sus familias (compraban o alquilaban sus casas, criaban a sus hijos, aportando riqueza a nuestra localidad). Ahora, en cambio, estos trabajadores van y viene en el autobús o en su coche particular y aquí no se dejan ni un euro… ¿Tan terrible es vivir en nuestra ciudad para que la gente escape de ella?
Y todos tenemos la culpa: nuestros políticos porque no hacen algo; nuestras empresas por tener ese complejo de inferioridad; y nosotros mismos, con ese carácter inmovilista y para nada luchador.
A lo mejor es que yo soy muy rara, pero me da pena que lo único que nos preocupe sea una escultura, cuando hay tantas cosas que se han llevado y por las que no nos hemos movilizado.