La Vexilología es la disciplina que estudia las banderas (considerando el concepto en su más amplio sentido) bajo todos sus aspectos: las banderas en sí, sus significados y su utilización). Adjunto esta definición como ayuda para nuestros doctos ediles, pues tras dar una vuelta por la ciudad se nota que no progresan adecuadamente en esta asignatura.
Nuestro Ayuntamiento ha llenado la ciudad de banderas con motivo del Bicentenario del sitio de Ciudad Rodrigo. Pero por no documentarse adecuadamente han conseguido que, lo que debería ser una celebración, se quede en una simple verbena. Todas las banderas que han izado, están mal colocadas, llevando a la confusión a mirobrigenses y a visitantes.
Sólo con entrar en Internet o abrir una enciclopedia, podemos saber la posición de los colores de las enseñas, y su errónea disposición puede provocar que en vez de a un país determinado estemos honrando a otro, sin saberlo. Al final estamos desorientando a todos (propios y extraños) y ya no sabremos, por ejemplo, si en su momento luchamos contra los franceses o, por el contrario fue contra los holandeses (a estos les ganamos… pero fue en el Mundial):
La bandera de la República Francesa consta de tres franjas verticales de igual tamaño, de color azul y rojo en los extremos y blanco en el medio. Pues bien, las banderas “francesas” que ha colgado nuestro ayuntamiento tienen las franjas horizontales y no verticales; y además aparece cambiado el orden de los colores, de manera que la bandera que ahora luce en nuestras calles no es la enseña gala sino la de Holanda. Si en vez de llevar el rojo en la parte superior (como la bandera de los Orange), colocáramos el azul, se trataría de la bandera de Serbia o Montenegro, al tener este país los mismos colores que la enseña francesa.
¿Y qué me decís de la de Portugal, nuestros vecinos, literalmente colgada al revés? Según su carta magna, la bandera de Portugal se compone de un rectángulo dividido verticalmente entre el color verde, pegado al mástil, y el rojo. Pues ya veis que aquí nos hemos inventado una nueva bandera.
En el caso de la nuestra, la española, no hay confusión posible, ya que esos colores no los comparte con ninguna otra.
Con la del Reino Unido ya es otro cantar: no la confunde la gente pero en su constitución se advierte que la franja diagonal blanca más ancha ha de estar hacía arriba, aquí nos pasamos el protocolo por nuestro Arco de Triunfo (ya veremos qué dicen de semejantes banderines los ingleses que nos visiten).
Señores concejales: no se puede y no se debe improvisar, porque quedamos a la altura de un niño de la E.S.O. No es obligatorio tener conocimientos de todo, pero sí intentar asesorarse y hacer las cosas bien, que es el nombre de Ciudad Rodrigo el que arrastran con estas meteduras de pata. Les recomiendo que cambien las enseñas cuanto antes si no quieren ser el titular de algún noticiero.
Nuestro Ayuntamiento ha llenado la ciudad de banderas con motivo del Bicentenario del sitio de Ciudad Rodrigo. Pero por no documentarse adecuadamente han conseguido que, lo que debería ser una celebración, se quede en una simple verbena. Todas las banderas que han izado, están mal colocadas, llevando a la confusión a mirobrigenses y a visitantes.
Sólo con entrar en Internet o abrir una enciclopedia, podemos saber la posición de los colores de las enseñas, y su errónea disposición puede provocar que en vez de a un país determinado estemos honrando a otro, sin saberlo. Al final estamos desorientando a todos (propios y extraños) y ya no sabremos, por ejemplo, si en su momento luchamos contra los franceses o, por el contrario fue contra los holandeses (a estos les ganamos… pero fue en el Mundial):
La bandera de la República Francesa consta de tres franjas verticales de igual tamaño, de color azul y rojo en los extremos y blanco en el medio. Pues bien, las banderas “francesas” que ha colgado nuestro ayuntamiento tienen las franjas horizontales y no verticales; y además aparece cambiado el orden de los colores, de manera que la bandera que ahora luce en nuestras calles no es la enseña gala sino la de Holanda. Si en vez de llevar el rojo en la parte superior (como la bandera de los Orange), colocáramos el azul, se trataría de la bandera de Serbia o Montenegro, al tener este país los mismos colores que la enseña francesa.
¿Y qué me decís de la de Portugal, nuestros vecinos, literalmente colgada al revés? Según su carta magna, la bandera de Portugal se compone de un rectángulo dividido verticalmente entre el color verde, pegado al mástil, y el rojo. Pues ya veis que aquí nos hemos inventado una nueva bandera.
En el caso de la nuestra, la española, no hay confusión posible, ya que esos colores no los comparte con ninguna otra.
Con la del Reino Unido ya es otro cantar: no la confunde la gente pero en su constitución se advierte que la franja diagonal blanca más ancha ha de estar hacía arriba, aquí nos pasamos el protocolo por nuestro Arco de Triunfo (ya veremos qué dicen de semejantes banderines los ingleses que nos visiten).
Señores concejales: no se puede y no se debe improvisar, porque quedamos a la altura de un niño de la E.S.O. No es obligatorio tener conocimientos de todo, pero sí intentar asesorarse y hacer las cosas bien, que es el nombre de Ciudad Rodrigo el que arrastran con estas meteduras de pata. Les recomiendo que cambien las enseñas cuanto antes si no quieren ser el titular de algún noticiero.