El comentario de hoy no es de crítica ni de denuncia, es sólo un lamento, un clamor para que nos fijemos cómo está nuestro río.
No llueve; o al menos este último año las precipitaciones han sido escasas en nuestra comarca, lo que nos ha llevado a un punto que, según la Confederación Hidrográfica del Duero, estamos en situación de prealerta, pues a las escasas precipitaciones hay que unirle las altísimas temperaturas sufridas este verano; y a eso sumarle que el pantano de Irueña sigue sin entrar en servicio, debido a que aún no han finalizado las tareas de deforestación ni las carreteras adyacentes.
Llamo vuestra atención sobre las fotos que adjunto a las que separa algún tiempo: una en la que el río discurría caudaloso; y las otras en las que se puede ver su estado actual. A su paso por el Risco de Martiago el río aparece cortado; sólo pequeños charcos destacan en el cauce seco. Deprime y nos hace plantearnos que de una vez por todas habría que empezar a ser inteligentes con el agua y con su uso. A fecha de hoy, a nuestro pantano no le quedan más que 5 Hm3 (de una capacidad total de 22,04 Hm3) y bajando… Quisiera que este pequeño pensamiento sirviese para que a la hora de asearnos cambiásemos el baño por la ducha, que cerrásemos los grifos a la hora de fregar, pues son miles y miles los litros que desperdiciamos desagüe abajo. Ojalá mi pequeña reflexión ayude a la hora de concienciarnos, porque sé que hacer que llueva… no lo voy a conseguir.
No llueve; o al menos este último año las precipitaciones han sido escasas en nuestra comarca, lo que nos ha llevado a un punto que, según la Confederación Hidrográfica del Duero, estamos en situación de prealerta, pues a las escasas precipitaciones hay que unirle las altísimas temperaturas sufridas este verano; y a eso sumarle que el pantano de Irueña sigue sin entrar en servicio, debido a que aún no han finalizado las tareas de deforestación ni las carreteras adyacentes.
Llamo vuestra atención sobre las fotos que adjunto a las que separa algún tiempo: una en la que el río discurría caudaloso; y las otras en las que se puede ver su estado actual. A su paso por el Risco de Martiago el río aparece cortado; sólo pequeños charcos destacan en el cauce seco. Deprime y nos hace plantearnos que de una vez por todas habría que empezar a ser inteligentes con el agua y con su uso. A fecha de hoy, a nuestro pantano no le quedan más que 5 Hm3 (de una capacidad total de 22,04 Hm3) y bajando… Quisiera que este pequeño pensamiento sirviese para que a la hora de asearnos cambiásemos el baño por la ducha, que cerrásemos los grifos a la hora de fregar, pues son miles y miles los litros que desperdiciamos desagüe abajo. Ojalá mi pequeña reflexión ayude a la hora de concienciarnos, porque sé que hacer que llueva… no lo voy a conseguir.
¡Es increible! No puedo creer que este así el rio... hace no demasiado pasé por allí y no estaba así. A ver si empieza a llover otra vez y se recupera.
ResponderEliminarQue tristeza nos causa ver el rio así
ResponderEliminarQuisiera animarle para que escriba sobre el río en verano ya que parece que solo acudimos a el los hijos del pueblo al volver a la tierra prometida y para nosotros es algo muyyy.... hermoso